viernes, 7 de febrero de 2014

Matemáticas Y Diversión 7. Un Problema Literario

Para empezar voy a dar la solución al enigma de “El Puente Y La Linterna”, planteado en la entrada del 16 de enero, porque unos de mi pueblo ya me han amenazado: “Como después de tanto pensar, resulte que es una chorrada, te romperemos las gafas”. Ahí va pues la respuesta:

Cruzan A y B (los dos más rapiditos). A regresa con la linterna. Tiempo transcurrido, 2+1 = 3 minutos.

Ahora cruzan C y D (los dos más lentorros). Este es el quid de la cuestión: si cruzan los dos más sosegados juntos, se minimiza la pérdida de tiempo que su tránsito requiere. B entonces vuelve con la linterna. Tiempo que tardan los dos “tranquilos”, más el regreso de B, 8 + 2 = 10 minutos.

Por último, cruzan A y B en 2 minutos más y ya están todos en la orilla buena.

Han empleado un total de 3 + 10 + 2 = 15 minutos, ¿me explico? Por tanto no exceden el tope y les llegará la batería. Esa noche en el refugio, se felicitan mutuamente por lo ingeniosos que han sido. Im-pre-sio-nan-te. Tan sencillo, tan difícil.
 
Este no era el puente

Por otra parte, en la entrada del 22 de enero, hacía referencia a una novela titulada “La Trama Nupcial”, de Jeffrey Eugenides, muy poliédrica, muy interesante, muy larga (aún no la he terminado). Posiblemente un día me anime a comentarla y a recomendarla, pero hoy la voy a usar para plantear un problema de lógica deductiva, de esos tan característicos que venían en la revista Quiz. Madeleine, la protagonista del libro, es muy buena en letras, pero en matemáticas flojea, quejándose de esta circunstancia que a ella se le antoja como una carencia. Cito textualmente a Eugenides (bueno, a su traductor al español):

 
“Los problemas lógicos, sin embargo, eran un quebradero de cabeza para el intelecto. «En el baile anual varios participantes ejecutaron su baile preferido con su pareja preferida. Alan bailó el tango, mientras Becky miraba cómo bailaban el vals. James y Charlotte hacían una pareja de bailarines fantástica. Keith estuvo estupendo en su foxtrot y Simon no pudo estar mejor en su rumba. Jessica bailó con Alan. Pero Laura no bailó con Simon. ¿Puede usted precisar quién bailó con quién, y con qué baile disfrutó cada cual?» La lógica no era algo que le hubieran enseñado a Madeleine de forma expresa. Era injusto que le preguntaran cosas de ese tipo. Hizo lo que sugería el manual: hacer un croquis y situar a Alan, Becky, James, Charlotte, Keith, Simon, Jessica y Laura en el salón de baile de una hoja de papel y los emparejó según las instrucciones. Pero el complicado tránsito no era algo que la mente de Madeleine fuera capaz de seguir de forma natural.”

 
Bueno, pues ahí lo tienes: si estás convencido de que tu mente supera en el desarrollo del razonamiento lógico a la de Madeleine, resuelve el acertijo. He de confesar que yo me fío del autor y aún no me he puesto a desentrañar quién bailó qué con quién. Confío en resolverlo para el mes que viene y si no, pediré ayuda. Feliz dolor de cabeza.

1 comentario:

  1. No me acordaba del nombre de tu blog.El Vallès me lo recordó el domingo pasado.Desde entonces me estoy poniendo al día.Sabía que eras ameno conversando,pero escribiendo me tienes admirado por tu léxico y tu forma de narrar.Voy a seguir tu blog,disfrutar con tus fotos,pensar un poco con tus acertijos (el del baile me ha parecido demasiado fácil una vez escritos los datos) y sonreirme con tu humor (aunque si es aragonés no te lo aseguro).

    ResponderEliminar